Seis recetas de paella valenciana

Vamos a presentarte seis recetas de paella Valenciana tradicionales, para que, siguiendo nuestras indicaciones, explicadas paso a paso, consigas paellas perfectas, con las que tus amigos «se chuparán los dedos».

La paella Valenciana, es una de las recetas españolas más populares y sabrosas. Por la calidad de los ingredientes con los que se elabora y su exquisito sabor, este plato ha adquirido una fama que ha traspasado nuestras fronteras.

La paella aparece entre los siglos XV y XVI, en las zonas rurales de Valencia, convirtiéndose rápidamente en un plato típico porque de forma rápida y sencilla se elaboraba una comida con los mismos productos que obtenían de su trabajo en el campo. La costumbre era comerla por la tarde cuando acababan su faena.

En sus orígenes utilizaban como ingredientes: aves, liebre, conejo, verduras frescas, azafrán, aceite de oliva, agua y, por supuesto, arroz. La cocinaban a fuego lento y con leñas de ramas de naranjos, lo que proporcionaba un olor y sabor especial.

Actualmente las buenas paellas, las que se consideran paellas de sobresaliente, se siguen cocinando con leña. El sabor que le da la madera es la que diferencia una buena paella de una superior. Como os comentaba antes en Valencia se utiliza la madera de naranjo, porque es la que tienen más disponible, y porque además es una madera que se consume con lentitud, con lo cual para hacer la paella se gasta menos leña. Pero se puede hacer con otras maderas, como por ejemplo madera de encina.

Para los valencianos, comer paella no consiste solo en disfrutar de este plato, implica también una costumbre social; ya que implica reunirse con familia y/o amigos en torno al fuego y disfrutar el placer de la compañía, de hacer juntos el guiso y de compartir un porrón de cerveza o tinto de verano mientras se va cocinando, a la vez que se van comiendo diferentes aperitivos; los más tradicionales son las cebolletas en vinagre y los pimientos en salmuera.

Cuando la paella está lista para consumir, se poner la paella en el centro y todos comen directamente del recipiente sin servirla en platos. Comer la paella en el mismo caldero, es un ritual auténtico, esto le da un aspecto nostálgico, es hacerlo como lo hacían antiguamente.

Otra costumbre es que los valencianos nunca cenan paella.

Como ocurre con la mayoría de platos populares, no existe una única receta de paella. Cada región ha reconstruido la receta, según sus costumbres y los productos más habituales de cada zona. Lo que sí, se tienen, son unas reglas comunes con las que se garantiza garantizan que el plato se acerque lo más posible a la excelencia:

1.- Es importante no remover el arroz, los valencianos es lo primero que te dicen. Esto tiene su razón de ser; el arroz autóctono de Valencia, absorbe muy bien el sabor del caldo, pero es muy delicado, por eso no conviene moverlo, para evitar que se rompa y salga un emplaste. Si ves que tienes el arroz mal distribuido es mejor «darle un meneno» moviendo el recipiente.

2.- El arroz no puede estar apelmazado, tiene que estar suelto, entero y sabroso; al coger el arroz con una cuchara, se tienen que caer los granos, si esto no pasa es porque le falta almidón y estaríamos delante de un risotto apelmazado.

3.- Lo importante de una paella es el arroz. Utilizar un buen arroz en la paella y en la cantidad necesaria para disfrutarla. Una buena paella nunca lleva demasiados ingredientes, y los que hay están subordinados al arroz. La carne y la verdura se utilizan para darle el sabor al caldo y que el arroz consiga ese sabor.

4.- El recipiente donde se cocina la paella no se llama “paellera” sino paella. Aunque La Real Academia Española admite ambas acepciones para esta palabra, es decir se le llama paella a la sartén donde se cocina, y a la vez da nombre al propio plato. La sartén, es decir la paella, con un diámetro muy grande (como mínimo 22 cm) y muy poco profundo (entre 5 y 10 cm), al que se le ha eliminado el mango y se le han puesto dos asas, que permiten cogerla cómodamente, para ayudar ya que algunas paellas pueden llegar a tener un diámetro muy grande.